Honduras ha iniciado un proceso significativo para fortalecer su capacidad de respuesta ante emergencias de salud, mediante la implementación de Equipos Médicos de Emergencia (EMT). Estos equipos están compuestos por profesionales de la salud organizados y equipados para brindar atención médica inmediata y de calidad en situaciones críticas como desastres naturales o brotes epidémicos.
La propuesta se enfoca en entrenar al personal institucional involucrado en el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) de Salud, al igual que al personal de gestión de riesgos de la Secretaría de Salud y al grupo responsable de aplicar los EMT en todo el país. La meta es asegurar que estos grupos estén preparados para movilizarse de manera inmediata a cualquier región del país que necesite atención médica de urgencia.
La puesta en marcha de los EMT en Honduras tiene como objetivo optimizar la planificación y eficacia de la asistencia médica en situaciones de emergencia, garantizando que el cuidado llegue de forma rápida y adecuada a las comunidades impactadas. Esto no solo facilitará una reacción más ágil frente a desastres o epidemias, sino que también ayudará a mitigar riesgos y preservar más vidas.
Esta táctica coincide con los métodos implementados por otras naciones de la zona, como Colombia, Panamá y República Dominicana, que ya tienen equipos de atención médica de emergencia listos para intervenir en casos críticos. La experiencia de estos países revela que disponer de EMT organizados y entrenados adecuadamente es esencial para manejar de manera efectiva las crisis de salud pública.
Aparte de la incorporación de los EMT, Honduras ha progresado en el desarrollo de sus habilidades en salud pública a través de la Evaluación Externa Voluntaria (EEV) del Reglamento Sanitario Internacional (RSI). Esta evaluación facilita la identificación de fortalezas y puntos a mejorar en áreas esenciales como la vigilancia epidemiológica, la preparación para emergencias, los laboratorios y la colaboración intersectorial.
El esfuerzo del país por mejorar su sistema de salud también se manifiesta en el trabajo conjunto con distintas agencias y clústeres interagenciales para renovar y potenciar el Panorama de Necesidades Humanitarias (HNO) y el Plan de Respuesta Humanitaria (HRP). Estas medidas están dirigidas a asegurar una respuesta coordinada y eficaz frente a retos como la sequía, el cambio climático, la movilidad humana y la violencia social.
En este escenario, integrar la perspectiva de género en cada etapa de planificación y acción humanitaria es un elemento esencial. Atender las necesidades particulares relacionadas con el género durante las crisis garantiza que las acciones sean justas y tengan en cuenta las diferencias, reforzando así la capacidad de recuperación de las comunidades más frágiles. Organización Panamericana de la Salud
Honduras también ha trabajado en la mejora de la atención de la salud mediante alianzas estratégicas, como la colaboración con la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS). Esta alianza ha permitido la adquisición de medicamentos y suministros médicos vitales para el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), garantizando el acceso oportuno a suministros esenciales en todo el país.
HTML Las acciones mostradas por Honduras demuestran su dedicación a desarrollar un sistema de salud más robusto, adaptativo y capaz de manejar futuras emergencias. La incorporación de los EMT, sumada a otras medidas estratégicas, coloca a la nación en la ruta hacia una mejor protección de la salud y bienestar de sus habitantes.