Cero grados, rachas de viento tan impertinentes como agresivas, lluvia perenne… El invierno neozelandés no da tregua, tampoco los inflexibles husos horarios, pues España se medirá con Países Bajos en los cuartos de final del Mundial a las 13.00 h. O, lo que es lo mismo, la emisión en España será a las tres de la madrugada. “¡Despiértense!”, pidió el técnico holandés Andries Jonker, directo y vangaalista por convicción, ya que trabajó con Louis Van Gaal en la selección masculina, Barça y Bayern; “es una pena que se juegue a esta hora y que los hinchas tengan que levantarse para ver el partido. Pero son las consecuencias de hacer un Mundial en esta parte del mundo. Creo, sin embargo, que será un duelo excelente y si les gusta el buen fútbol y la tensión, los animo a que lo vean”. Vilda le buscó una vuelta: “Que no se acuesten. Creo que es más fácil… Que alarguen un poquito. Los jueves de ahora son los viernes de antes. No vamos a defraudar, es un día histórico y queremos hacer felices a todo el país”. La recompensa: alcanzar unas semifinales en la Copa del Mundo y reescribir la historia.
España sueña con una frontera nunca cruzada, un escenario desconocido. Lo mismo que la presunta propuesta de Holanda porque hasta ahora los rivales le aguardaron atrás, bloque bajo y las contras por bandera. No parece que pretenda lo mismo el conjunto neerlandés, de buen gusto para la construcción, preocupado por generar superioridades por dentro para impulsarse por fuera y finalizar las jugadas, certera en el remate. “Son un equipo muy sólido, tienen tres centrales de garantías que van bien por abajo y por arriba, también son muy peligrosas y fuertes a balón parado, y además tienen jugadoras que pueden decidir a la mínima que te descuides. Como Roord, que no te das cuenta y ya te ha metido dos goles”. Jonker cogió el relevo: “España juega siempre a lo mismo, al juego español. Aprecian lo que hacen, jugar el balón. Es lo que nos gusta y respetamos. Pero hemos disputado dos encuentros a un gran nivel y hemos demostrado de qué estamos hechos. Pensamos que podemos vencer y no les tememos”, aclaró. Vilda replicó: “Nosotros no tenemos secretos ni miedo a que se desvele algo de nuestro fútbol. Saben cómo jugamos, nuestra filosofía”.
Aunque a España se le atragantó Japón, equipo tan disciplinado como efusivo en las contras, Países Bajos tiene otra hoja de ruta. “Nosotras determinaremos nuestra forma de jugar y no vamos a copiarles”, reflexionó la extremo Lineth Beerensteyn, también jugadora de la Juventus. Jonker, además, vio un encuentro distinto al que expresó el marcador. “Miro el fútbol a mi manera. España jugó, creó… El fútbol es extraño porque a veces no gana el mejor equipo y creo que la selección española hizo un gran partido”. Vilda, en cualquier caso, tiene claro el plan: “El partido se decide en las áreas pero ante Holanda sí que puede darse un mini partido en el centro del campo porque tienen jugadoras de calidad en el medio, que dominan los espacios y la posición”.
Países Bajos, subcampeona en el anterior Mundial y campeona de Europa en 2017, tiene callo en estos encuentros de tensión, aunque tienen la baja de la mediocentro Van de Donk. “No creo que la experiencia marque la diferencia, sobre todo porque las españolas tienen también mucha experiencia con la Champions y partidos a muy alto nivel”, deslizó Jonker. Argumento que compró un Vilda que ya puede contar con todas sus jugadoras: “Sí que ellas tienen experiencia a nivel de selección, pero nuestras jugadoras también han estado en partidos importantes, en clubes y categorías inferiores de la selección”. Y cerró: “He notado que desde que empezamos, el alma de este equipo es mayor. Y al acabar el último entrenamiento había una energía especial. Me gusta mucho lo que veo en los ojos de mis jugadoras”. Toca jugar, tocan los cuartos de un Mundial.